Ayer, mientras paseaba con N por la ría de Bilbao, debatíamos si la gente actuaba de forma racional o sin pensar muy bien en lo que aquello les puede afectar en el futuro.

Fueron dos horas de larga conversación por la cual llegamos a la conclusión que la gente actúa por lo que tiene o desea en ese momento y que de ello dependerá su felicidad.

Cuando yo me fui de mi casa (me independicé), no sabía realmente lo que estaba dejando atrás: el cuidado de mis padres, el tener todo hecho y no tener que hacer nada, el sustento económico de mis padres, el tener a mi familia y amigos cerca, etc. En su momento, no pensé mucho en todo ello, más bien me convencí de que eso no debería afectarme nunca pues sino acabaría arrepintiéndome tarde o temprano de lo que estaba haciendo.

Ahora ha hecho un año ya de mi marcha, y si es cierto que echo mucho de menos todo aquello, no me arrepiento en absoluto el paso tan importante que dí en su día. Animada por mis antiguos compañeros de trabajo, a los cuales les debo mucho (sin que ellos lo sepan), decidí hacer la maleta a otro lugar para poder desarrollarme profesional y personalmente.

Yo decidí estudiar y trabajar lejos de los míos por mi futuro (también es cierto que mi situación económica lo requería pues no podía permitirme una universidad privada), pero todo el mundo es capaz de hacer ese esfuerzo de coger sus cosas atrás para ser mejor en el futuro? Ya no hablo de independizarse e irse a la Conchinchina, pero y si realmente fuera necesario para tu carrera profesional? Lo harías?

Yo sin duda alguna lo haría, como si tuviera que vivir sola en un país desconocido con un idioma extraño.

Es por ello que decidí escribir esta entrada, para que quién la lea se anime a hacer lo que tiene que hacer. La vida solo se vive una vez y basta que se pase el tren de tu vida para que te arrepientas toda ella de no haberlo cogido a tiempo. Y eso amig@s... eso te quita la felicidad para siempre.